A partir del número 27, Mediodicho comenzó a nombrarse Revista de Psicoanálisis y en el mismo acto en que señalaba su especificidad se concebía para un lector que pueda no estar entre nosotros. Cinco años después, a partir del número 34, ingresa en el catálogo internacional -Latindex – de revistas de calidad editorial y entonces a disposición de los investigadores de habla hispana.
Es en la serie que podremos hacer una lectura de lo que esta inscripción significa para el Otro social y para nuestra propia comunidad psicoanalítica.
Este número: “Semblante. Cuando las apariencias no engañan” sigue en su Sección Avanzada… el cauce del número anterior: dos elaboraciones provocadas serán los aportes a la elucidación de lo que entendemos por “la extimidad del psicoanálisis en la sociedad contemporánea”.
Luego encontramos un desarrollo esclarecedor sobre la interpretación lacaniana más allá del Edipo, este texto se enmarca en el programa de trabajo sobre la Psicosis Ordinaria, que seguimos en todas las Escuelas de la AMP.
En las Secciones siguientes, el Discurso del analista y sus efectos, será la temática ampliamente desarrollada, donde encontraremos el Semblante en sus diferentes funciones. Semblantes que no engañan en tanto bordan, transparentan, escriben alrededor del agujero forclusivo.
Del lado del analista como agente del discurso, dando lugar a la posición del analista en la transferencia y su correlato la posición analizante.
El Semblante como operador del acto analítico, interpelando el goce, registrando así la existencia de lo real en cada momento como algo positivo.
El cómo enfrentar las opacidades del ser cuando estas adoptan los semblantes de la tristeza y la melancolía. La puesta a prueba del dispositivo de la Presentación de Enfermos, en esta oportunidad con un niño que queda aislado bajo el peso de un secreto de familia. Lo que resta cuando los semblantes caen, el analista como partenaire-sínthoma. Son las líneas de lectura en los trabajos clínicos.
Si la verdad es semblante, los efectos de verdad no lo son, los testimonios del Pase nos permiten avanzar sobre preguntas importantes en nuestras investigaciones hoy: ¿cómo se vive la pulsión sin el Otro del fantasma?, ¿cómo se interpretan los sueños más allá del padre?, ¿qué estatuto tiene el inconsciente en el post-analítico? Nos encontraremos con lo real tratable y lo real intratable que nos lleva a una discreción sobre el trato que se pueda dar a lo real. Mujeres analistas y semblante.
Cuando los semblantes vacilan en la adolescencia.
Estudios de género problematizando la “categoría homosexual” nos van dando los hilos de una trama que encuentra sus fundamentos en el Seminario 18 de Lacan, seminario que, como nos lo dice la reseña, conversa con el Seminario 17. Y allí pasando ya a la realidad psíquica – realidad social nos encontramos con la entrevista realizada a un historiador sobre El Cordobazo, acontecimiento de mayo de 1969 en Córdoba del que hoy, 40 años después, leemos sus marcas.
En la portada una artista plástica de Córdoba nos ofrece uno de los cuadros de la serie llamada “A segunda vista” juego de semblantes … apariencias … transparencias.
Hilda Vittar